EUROPA PRESS
9 marzo 2016
El físico afecta a las
oportunidades de la vida
Ser un hombre de baja estatura o una mujer con sobrepeso
está vinculado con menores posibilidades de desarrollo en áreas como la
educación, la ocupación y los ingresos, según concluye un estudio publicado en
'British Medical Journal'.
Los
resultados proporcionan fuerte evidencia de que las personas con sobrepeso,
especialmente las mujeres, están en desventaja socioeconómica y que las
personas más altas, especialmente los hombres, están en una ventaja
socioeconómica.
Es
bien sabido que el estatus socioeconómico más alto se vincula con una mejor
salud y una vida más larga. En los países desarrollados, ser más alto y delgado
se asocian con un mayor estatus socioeconómico, pero
las direcciones de estas relaciones no se entienden completamente.
Para
comprender mejor estas interacciones, un equipo de investigadores de Reino
Unido y Estados Unidos, dirigidos por el profesor Timothy
Frayling, de
Se
analizaron las variantes genéticas con efectos conocidos sobre la altura y el
índice de masa corporal de 119.000 individuos de edades comprendidas entre 40 y
70 años en el Biobanco del Reino Unido --una base de
datos de información biológica de medio millón de adultos británicos-- mediante
una técnica denominada aleatorización mendeliana.
El
uso de la información genética de esta manera evita algunos de los problemas
que presentan los estudios de observación, haciendo que los resultados sean
menos propensos al sesgo y a factores de confusión no medidos, y por lo tanto
más probable que sean fiables.
Se
evaluaron cinco medidas de nivel socioeconómico: la edad a la que se completó
todas las etapas educativas, el nivel de grado educativo, la clase de trabajo,
el ingreso anual de los hogares y el índice de privación Townsend
(una puntuación de privación social reconocida). Los análisis se repitieron por
separado para hombres y mujeres.
Los
resultados muestran que la altura más baja, según las estimaciones de la
genética, conduce a niveles más bajos de educación, menor estatus en el trabajo
y menos ingresos, sobre todo en los hombres, y que una mayor índice de masa
corporal lleva a menores ingresos y mayores privaciones en las mujeres.
Una
serie de factores podría vincular la estatura más alta a una mayor posición
social, aunque este estudio no tuvo en cuenta cuál de estos factores estuvo involucrado,
explican los autores. Sin embargo, dicen que entre las posibilidades están
interacciones complejas entre la autoestima, el estigma, la discriminación
positiva y el aumento de la inteligencia.
"Estos
datos apoyan la evidencia de que la altura y el IMC juegan un papel parcial
importante en la determinación de varios aspectos de la situación
socioeconómica de una persona, especialmente el IMC de la mujer para los
ingresos y las carencias y la altura de los hombres para la educación, el
ingreso y el tipo de tarea", escriben.
"Estos
resultados tienen importantes implicaciones sociales y de salud, respaldando la
evidencia de que las personas con sobrepeso, especialmente las mujeres, están
en desventaja y que las personas más altas, principalmente los hombres, tienen
una ventaja", concluyen.